Formas de diseñar sitios web para que los usuarios puedan interactuar con ellos de la forma más fácil, cómoda, motivada e intuitiva posible.
Todo apunta a que este año 2017 será el momento del u-commerce, esto es, el comercio electrónico pensando en el usuario, en su objetivo y en facilidad que tiene para conseguirlo en una web, en resumidas cuentas, la experiencia de usuario (UX).
Aunque la línea que separa el diseño UX (experiencia de usuario) de la arquitectura de información es muy fina, hay una clara diferencia entre ambos conceptos. Por un lado podemos definir la arquitectura de información como la ciencia de organizar y etiquetar sitios web con el objetivo de simplificar su uso. En cambio, la UX
Muchas veces pensamos que si nuestro sitio web tiene un diseño innovador y limpio no es necesario implementar pequeñas modificaciones que puedan mejorar la UX (experiencia de usuario).
Todos los que hacemos la compra online sabemos que la web de Mercadona es una web antigua y con una experiencia de usuario nefasta, desde la inexistencia de fotografías de productos, hasta las letras minúsculas.
¿Los “espacios en blanco” realmente son beneficiosos para mejorar la UX? Antes de contestar a esta pregunta necesitamos saber que son realmente los “espacios en blanco”.
Desde hace años, con la aparición del flash, las animaciones en páginas web ha ido avanzado a un ritmo vertiginoso, tanto que hoy en día son utilizadas incluso en procesos tan complejos como las páginas de pago.
Las “migas de pan” (breadcrumbs en inglés) se han ido convirtiendo poco a poco en una navegación alternativa para el usuario, ya que gracias a ellas evitamos que el usuario se pierda por nuestra web y por consiguiente mejoraremos la experiencia de usuarios (UX).
Hoy en día la evolución del diseño web es tal que ya no recordamos como era programar webs en el bloc de notas con html puro. Ahora la experiencia de usuario (UX) está jugando un papel fundamental, apoyando el proyecto desde el inicio.
Una de las teorías seguidas por los Diseñadores UX es la Ley de Fitts. Esta ley aplicada al diseño web, está relacionada con el movimiento del usuario en torno a los elementos que componen la interfaz. Te explicamos con ejemplos cómo aplicarla correctamente.
Realmente la pregunta no es “¿cuándo necesitamos hacer cambios en la web?”. Lo que tenemos que preguntarnos es si nuestro usuario realmente consigue cumplir su objetivo de forma fácil, sencilla y efectiva.
